"Dejo todos mis cargos. Dejo la polí­tica entendida como polí­tica de partido e institucionalâ?, aseguró el dirigente frente a sus seguidores en el bunker electoral en Madrid.

Me he convertido en un chivo expiatorio. Es evidente que, al dí­a de hoy, no contribuyo a sumar. Y cuando los resultados son los que son, uno tiene que tomar decisiones. No puedo ser un tapón para la renovación de liderazgo que necesita nuestro partidoâ?, agregó.

Iglesias se refirió también, aunque de manera breve, a la necesaria renovación de Unidos Podemos, destacando la importancia de nuevos liderazgos y de las mujeres en la â??construcción de la nueva polí­ticaâ?.

??Yolanda Dí­az (ministra de Trabajo y actual vicepresidenta tercera del gobierno de España) va a determinar el futuro de la izquierda en los próximos años. Estoy orgulloso. Cuando uno deja de ser útil tiene que saber retirarseâ?, añadió.

De concretarse, la sucesión de Dí­az deberá plantearse en un congreso del partido.

Parte de su descontento puede explicarse, también, por el notable desempeño de Mas Madrid, una fuerza nueva, también de izquierda y liderada por su examigo y socio polí­tico Iñigo Errejón, que logró sumar 24 bancas y se convierte así­ en la fuerza emergente del sector en esa ciudad.

Con el inesperado anuncio, Iglesias pone fin a sus 42 años en el partido que cofundó en 2014.

??Yo no sé lo que es el destino; caminando fui lo que fuiâ?, dijo al citar un fragmento de El necio, una canción del cubano Silvio Rodrí­guez.