La ONU denuncia violaciones de DDHH de la policía en las protestas en Chile
"Estas violaciones incluyen el uso excesivo e innecesario de la fuerza que ocasionó muertes ilícitas y heridas, tortura y malos tratos, violencia sexual y detenciones arbitrarias", dice el documento de 30 páginas.
Viernes, 13 de Diciembre de 2019
La oficina de la Alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, denunció este viernes un "elevado número de violaciones de derechos humanos" por la represión policial a las protestas en Chile, al presentar un informe sobre la situación en el país sudamericano.
"Estas violaciones incluyen el uso excesivo e innecesario de la fuerza que ocasionó muertes ilícitas y heridas, tortura y malos tratos, violencia sexual y detenciones arbitrarias", dice el documento de 30 páginas que resume el trabajo del equipo que viajó a Chile para investigar la situación durante tres semanas de noviembre.
Según las pruebas recabadas, "existen razones fundadas para creer que, desde el 18 de octubre, se ha cometido un elevado número de violaciones de derechos humanos". "La gestión de las manifestaciones por parte de Carabineros se ha llevado a cabo de manera fundamentalmente represiva. Carabineros ha incumplido, de forma reiterada, con el deber de distinguir entre personas que se manifestaban pacíficamente y manifestantes violentos", concluye.
Una de las cuestiones que más llamó la atención de los expertos fue "el número alarmantemente alto de personas con lesiones en los ojos o la cara", por el "uso desproporcionado y a veces innecesario" de escopetas antidisturbios.
"En cuanto a responsabilidades individuales en la policía, no podemos sacar conclusiones", afirmó Imma Guerras-Delgado, jefa del equipo de misión en Chile, en una conferencia de prensa en Ginebra.
Las protestas sociales que estallaron el 18 de octubre en Chile han provocado la crisis más profunda desde el retorno a la democracia en 1990, con un saldo hasta el momento más de una veintena de muertos y miles de heridos.
"La mayoría de las personas que ha ejercido su derecho a la asamblea durante este periodo lo ha hecho de manera pacífica", aunque también "ha habido numerosos ataques contra fuerzas de seguridad y sus instalaciones", así como "saqueos y destrucción de propiedad", asegura el informe.