Un militar saudí mató el viernes a tres de sus compañeros en un tiroteo e hirió a otras siete personas. De nacionalidad saudí, se encontraba en el cuartel de Pensacola, una base militar de Estados Unidos, perfeccionándose como piloto. Antes de perpetrar la matanza, al Shamrani estuvo visionando vídeos de otras masacres. Al final, el asesino acabó siendo abatido.

El atacante, Mohammed Saeed al Shamrani, abrió fuego a las siete de la mañana dentro de la base naval, en la que trabajaban 16.000 soldados y 7.400 civiles. Seis horas después del ataque, se reveló que la identidad del atacante era teniente segundo de la Fuerza Aérea de su país y alumno en la escuela de aviación estadounidense.

En un comunicado, el rey Salmán de Arabia Saudí ha calificado el ataque como un "crimen abominable" y ha anunciado que los servicios de su país están trabajando con las autoridades estadounidenses para intentar saber el motivo del tiroteo.

Se trata del segundo ataque con armas de fuego en menos de una semana dentro de una base militar de Estados Unidos. Las autoridades militares han abierto una investigación sobre un posible acto de terrorismo. Aunque de momento, el FBI lo descarta.