La agencia de noticias oficial iraquí, NINA, informó de la llegada de Pompeo y la televisora local Al Sumariya afirmó que se reunió "brevemente" con el primer ministro Adel Abdel Mahdi, según reprodujo la agencia de noticias EFE.

El Departamento de Estado norteamericano no informó aún sobre la agenda que tendrá Pompeo, un política muy común cuando funcionarios de primer nivel viajan a zonas en conflicto o posconflicto con niveles alto de violencia.
La única información oficial partió de la embajada estadounidense en Berlín, que confirmó el cambio de planes del jefe de la diplomacia.
"Desafortunadamente, debemos reprogramar las reuniones de Berlín debido a asuntos acuciantes; esperamos reprogramar este importante conjunto de reuniones; el secretario espera estar pronto en Berlín", sostuvo la sede diplomática en un comunicado.
Además de la creciente tensión regional por el anuncio de un refuerzo militar estadounidense en el Golfo Pérsico con portaaviones y bombarderos, la relación bilateral entre Washington y Bagdad también atraviesa un momento sensible.
Unas horas antes de la llegada de Pompeo, el premier iraquí había asegurado a la prensa que no tenían ningún acuerdo con la Casa Blanca para exceptuar al país de las sanciones norteamericanas impuestas contra Irán, principalmente su sector petrolero.
Irak es un importante socio político y comercial de Irán y, desde que Washington salió del acuerdo nuclear con Irán y anunció nuevas sanciones el año pasado, dejó bien claro a su aliado occidental que continuará haciendo negocios con Teherán.
El gobierno iraquí ocupa un lugar bastante único en el entramado de alianzas en la región ya que es un aliado cercano de Estados Unidos y también de Irán.