Tras finalizar su gira The Forget Tomorrow Tour, Justin Timberlake enfrentó duras críticas de sus fanáticos por su bajo rendimiento en los shows: muchos notaron que casi no cantaba y se mostraba desganado, cediendo al público buena parte del repertorio. Sin embargo, el artista sorprendió al revelar el motivo detrás de su actitud sobre el escenario: fue diagnosticado con la enfermedad de Lyme.

"Entre otras cosas estuve luchando contra algunos problemas de salud y me diagnosticaron la enfermedad de Lyme. No lo digo para que se sientan mal por mí, sino para arrojar algo de luz sobre lo que estuve enfrentando detrás de escena", expresó el músico de 44 años en sus redes sociales.

La enfermedad de Lyme es una infección bacteriana transmitida por la picadura de una garrapata infectada y, si no se trata a tiempo, puede afectar la piel, las articulaciones, el corazón y el sistema nervioso. Timberlake confesó que el diagnóstico lo tomó por sorpresa, pero le permitió comprender por qué sentía "dolores en los nervios, una fatiga extrema o malestares inexplicables" durante los recitales.

"Me costaba hablar de esto porque me criaron para mantener estas cosas en secreto. Pero quiero ser más transparente sobre mis dificultades para evitar malentendidos", agregó.