El Gobierno, a través del Ministerio de Justicia, anunció este viernes una serie de cambios en los trámites para la compraventa de automotores y otros rodados, con el objetivo de reducir la burocracia en los Registros Automotor. La iniciativa, impulsada por la cartera dirigida por Mariano Cúneo Libarona, permitirá a los usuarios elegir el Registro Automotor de su preferencia para realizar los trámites, eliminando la restricción actual que se basa en el domicilio del propietario.

Además, se ha decidido digitalizar los legajos automotores, lo que eliminará la necesidad de trasladar documentos físicamente entre los diferentes Registros, y se espera que genere un ahorro mensual de $1.300 millones. Otra de las medidas destacadas es la reducción de la alícuota para la transferencia de vehículos al 1%, desde el 1,5% para autos nacionales y el 2% para importados. Asimismo, se eliminarán los aranceles para la emisión de documentación como la cédula verde, el título y la chapa patente.

El anuncio también incluye la creación de un Legajo Único Digital (LDU) y la implementación de un tope en los ingresos que pueden percibir los encargados de los registros automotores. Estas medidas forman parte de una serie de cambios aplicados por el ministro Cúneo Libarona, que también han incluido el cierre del 40% de los Registros y una reducción del 30% del personal.

En cuanto al costo de transferir un auto usado, con la nueva alícuota del 1%, se prevé una disminución significativa. Hasta ahora, el costo era del 1,5% del valor total para vehículos nacionales y del 2% para importados, con variaciones según la provincia debido al Impuesto de Sellos local. Por ejemplo, patentar un auto 0km en la Ciudad de Buenos Aires es un 200% más caro que en Santiago del Estero.