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Economía Finanzas

El BCRA le giró otros $100.500 millones al Tesoro en lo que va del mes

La deuda remunerada del ente monetario ya supera el equivalente a la base. Hoy no está en la agenda, pero mejor resolverlo antes de que sea tarde.

Jueves, 24 de Setiembre de 2020
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La ventaja, a diferencia de las Lebac, es que está solo en manos de los bancos por lo que se sospecha que será más fácil renegociar. Hoy no es un tema de agenda pero mejor que el Gobierno no espere a último momento para encarar alguna solución porque si no se puede transformar en un problema serio y más complicado de resolver como ya está ocurriendo con el caso del dólar ahorro. Esto viene a cuento de que en el Presupuesto 2021 el déficit proyectado se financiará en gran parte con emisión monetaria. De modo que el BCRA deberá enfrentar nuevamente el dilema de inflación versus esterilizar y aumentar el stock de Leliq. Todo esto está vinculado, además, con las principales restricciones que llevará la economía argentina al próximo año, que es electoral, que son básicamente un exiguo nivel de reservas disponibles, un elevado nivel de endeudamiento del BCRA y sin financiamiento. Estas limitaciones conspirarán con la recuperación de la economía.

El balance monetario muestra, en lo que va del año, que la base monetaria apenas se expandió en $385.393 millones donde los factores expansivos fueron el financiamiento al sector público por $1,6 billones y el pago de intereses por casi medio billón. Mientras que, por otro lado, el BCRA absorbió la emisión vía Pases y Leliq por $1,36 billones, más $279.000 millones a través de la venta de divisas al sector privado ($219.000 millones) y al sector público ($60.000 millones) y $45.000 millones que el Gobierno dejó depositados en el BCRA.

Es importante, dada la dinámica fiscal, monetaria y cambiaria, que el Tesoro haga buena letra, como parece lo viene haciendo en los últimos meses para ir reduciendo la asistencia financiera del BCRA. Esto implicaría un menor exceso de pesos en circulación y menor presión tanto por el lado cambiario como inflacionario. Así y todo nada garantiza que si continúan los cortocircuitos y contramarchas en el seno del equipo económico la desconfianza no se apodere del espíritu de los tenedores de pesos.