La divisa terminó a $54,86 para la punta compradora y a $59,08 para la vendedora, por lo que sumó tan sólo un centavo respecto del día anterior.
En Banco Nación, fue ofrecido a $58,50; al tiempo que la cotización más elevada se dio en los mostradores de Banco Macro y Piano a $60.
El dólar mayorista, por su parte, sumó diez centavos con relación al jueves, al ubicarse en los $56,67.
Respecto del viernes de la semana pasada, el tipo de cambio en el segmento en el que operan entidades financieras y empresas ganó 56 centavos.
De ese modo, el billete terminó por segunda semana consecutiva por encima de los $56, aunque con límites más marcados respecto de su máximo valor alcanzado.
El volumen negociado en el segmento de contado fue nuevamente limitado, de US$ 347,997 millones.
Operadores consideraron que este viernes la actividad en la plaza cambiaria se dio en un marco de mayor tranquilidad, aunque las entidades financieras oficiales volvieron a aparecer para llevar a cabo ventas con el fin de equilibrar la corriente compradora.
En las últimas ruedas, el dólar mostró menos volatilidad ante la estrategia de abastecer al mercado con ventas e intervenir en futuros para contener las expectativas en los plazos más cortos.
La atención estará puesta el lunes en lo que pueda suceder con el BOPOMO 2020, un bono que deberá pagar la autoridad monetaria por 24.800 millones de pesos.
La advertencia de algunos analistas se vincula con la posibilidad de que ese dinero se vuelque al dólar.
Es que una mayor demanda de acreedores presionaría sobre el tipo de cambio y ello podría provocar una nueva escalada de la moneda norteamericana en un contexto de escasez de divisas.
En tanto, la tasa promedio total diaria de política monetaria tuvo un leve recorte y quedó en 82,245%.