Los días de festejo y relajación de Lionel Messi parecen haber terminado. En Rosario, aterrizó su avión y a la noche emprendió el viaje a Francia para reincorporarse al PSG y cambiar el chip luego de haber llegado a la cima del mundo consagrándose campeón con la Selección Argentina en Qatar 2022.

Messi, su mujer Antonela Roccuzzo y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro llegaron poco antes de las 21 a la zona de embarque, en un operativo para cuidar su intimidad.

Quizás algún integrante más de su familia con los que compartieron estos días de intimidad en un country de la ciudad de Funes, a 30 kilómetros de Rosario, se haya sumado a la comitiva.

Atrás quedarán, entonces, aquellos festejos multitudinarios en la autopista Ricchieri con un "viajero" en una mano y la tan deseada Copa del Mundo en la otra; la llegada en helicóptero a Funes, los autógrafos para los vecinos; la "Fiesta del Campeón" con compañeros (Ángel Di María y Leandro Paredes), familiares, amigos e invitados que quisieron compartir este momento tan especial con el futbolista de 35 años.

El martes pasado, el entrenador del PSG, Christophe Galtier anunció que Messi iba a reincorporarse al plantel entre el 2 y el 3 de enero, después de pasar Navidad y Año Nuevo junto a su familia en Rosario.

Así se perdió la agónica victoria frente a Racing de Estrasburgo el miércoles pasado y la derrota contra el escolta Lens, mientras que tampoco estará probablemente el viernes 6, cuando enfrente al Chateauroux por la Copa de Francia.

Su retorno a un campo de juego en forma oficial, entonces, sería el miércoles 11 frente al Angers, por la Ligue

Un libro de despedida

Lionel Messi recibió este lunes un libro de firmas dedicado por algunos de sus vecinos del barrio privado donde está su casa en Rosario. Fue momentos antes de culminar sus vacaciones tras su coronación como campeón mundial en Qatar 2022 y volver a Francia para reincorporarse al Paris Saint-Germain.

Según Juan Félix Rossetti, administrador del Kentucky Club de Campo, el capitán de la selección argentina, que tocó el cielo con las manos el 18 de diciembre pasado, recibió un libro en el que los copropietarios le dejaron mensajes y salutaciones.

La entrega del ejemplar se hizo de forma privada, a través del entorno familiar del futbolista, que envió a la administración del exclusivo barrio -ubicado en la localidad de Funes, en el cinturón urbano de Rosario-, dos fotos de Messi recibiéndolo en el interior de su casa.