Sean "Diddy" Combs sigue detenido en el Centro Metropolitano de Brooklyn tras ser acusado de tráfico sexual, extorsión y prostitución. Las denuncias en su contra se remontan a dos décadas, muchas de las cuales mencionan las famosas fiestas que el rapero organizaba en su mansión en los Hamptons. Durante los años 2000, las "Freaks Off", conocidas como las Fiestas Blancas de Diddy, eran sinónimo de exclusividad y reunían a numerosas celebridades.

En una entrevista con "The Independent", Combs se comparó con el personaje de The Great Gatsby, haciendo referencia a sus fastuosas fiestas. Sin embargo, los fiscales aseguran que el rapero organizaba estos eventos con empleados, facilitadores y trabajadoras sexuales, y que el consumo de drogas era habitual.

Según los investigadores, las Fiestas Blancas duraban varios días y los participantes eran forzados a realizar actos sexuales que eran grabados. Una de las denuncias más impactantes proviene de Adria English, quien relató que fue contratada por Combs para asistir a una de estas fiestas, donde fue drogada y forzada a mantener relaciones sexuales con los invitados.

En su demanda de 114 páginas, English detalló que recibió mil dólares por uno de estos encuentros y que la vestimenta que le asignaron indicaba su disponibilidad sexual. También denunció haber sido agredida y filmada sin su consentimiento en dos eventos, uno en Nueva York y otro en Star Island, Florida.

Diddy, quien dejó de realizar estas fiestas en 2009, se enfrenta ahora a cargos que podrían llevarlo a prisión por un mínimo de 15 años, o incluso a cadena perpetua si es declarado culpable.