El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, fue liberado tras pasar 1.901 días en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh.

El Tribunal Superior de Londres le concedió la libertad bajo fianza, permitiéndole abandonar el Reino Unido después de enfrentar una larga saga legal. Assange se declarará culpable ante el tribunal federal de las Islas Marianas por un cargo relacionado con la Ley de Espionaje de Estados Unidos, poniendo fin a un caso que ha captado la atención internacional.

El acuerdo alcanzado garantiza que Assange admitirá su culpabilidad sin enfrentar más tiempo de prisión adicional, ya que se consideran los cinco años que ya ha cumplido en el Reino Unido. Este acuerdo sigue años de disputas legales y controversias sobre su papel en la publicación de documentos clasificados que abarcan desde vídeos de ataques militares hasta cables diplomáticos sensibles.

Assange, quien ha enfrentado acusaciones de violación que han sido retiradas, ha sido una figura polarizadora, defendido por muchos como un defensor de la libertad de prensa y criticado por otros por supuestos daños a la seguridad nacional de Estados Unidos.