La policía seguía una denuncia realizada hace unos meses una denuncia por comercialización con clorhidrato de cocaína.

Según informó el Ministerio de Seguridad: "Ambos departamentos funcionaban como bunkers, con extremadas medidas de seguridad, puertas con rejas para ingresar al primer predio de los monoblock y desde allí segundas puertas con mayores dimensiones que las anteriores, la que se ubicaban en los departamentos propiamente dicho, por ello, se debió  convocar al Grupo Especial de Seguridad".

Los vendedores realizaban las ventas extremando las medidas de seguridad e inclusive utilizaban “satélites” para detectar la presencia de personal de fuerzas de seguridad en la zona.

En uno de los departementos, los detenidos habían notado la presencia policial e intentaron “descargar” la dosis de clorhidrato de cocaína a través del inodoro del baño, siendo sorprendidos “in-fraganti”. Allí fueron detenidos un hombre de 36 años y su pareja de 46 años. También se encontraron $55 mil peoss producto de la comercialización de la droga.

En el otro departamento fue detenida una mujer de 46 años quien guardaba la recaudación. Se halló medio kilo de clorhidrato de cocaína compactada en un ladrillo, junto a $75.000, cogollos de marihuana , elementos de corte y fraccionamiento, todo se encontraba con candado en una pequeña caja de seguridad.

Tomó intervención el Juzgado Federal nº3 a cargo del Dr. Marcelo Garnica y la Secretaria Penal “D” a cargo de la Dra. Mariana Leiva. Se dispuso la detención e incomunicación de las tres personas, que quedaron alojadas en la U-32.